Domingo, 21 de Marzo del 2021

De hecho, soy la verdadera 34

"..."

En ese momento, Rose previó que la dama no tendría éxito en fingir ser una pobre aristócrata del campo.

Jamás podría llevar a cabo semejante actuación.

Jamás.

Keira: "¿Qué haría Rose si tuviera una cita? ¿Hmm?"

Rose: "..."

Con sus ojos brillando así, Rose no pudo evitar responder. A pesar del evidente fracaso, no tuvo más remedio que dar un consejo.

Rose: "Las parejas que no tienen dinero suelen ir en carruaje o dirigible para hacer turismo en la capital"

Keira: "Ya veo"

Rose se preguntó cómo le iría a su señora, que tenía aversión a los asientos públicos del teatro porque la gente 'se sentaba muy junta', en un carruaje público o en un dirigible.

Rose: "Pero puede ser un poco incómodo para usted porque es un transporte público para plebeyos. ¿Seguro que no te importa?"

Keira: "No te preocupes. He estado en pubs donde van plebeyos"

Lo dijo con mucho orgullo. Después de todo, ella ha probado platos y aperitivos de baja calidad[1].

Si Sir Joseph hubiera escuchado lo que dijo Keira, estaría dolido y sin saber qué decir.

Fueron a un bar utilizado por los plebeyos, pero no era en absoluto 'barato'. Jamás llevaría a la preciosa dama a un lugar así.

La comida que ella pensaba que era de baja calidad no lo era en absoluto. En primer lugar, las frutas en sí son bastante caras. Las frutas secas serían aún más caras.

Rose: "Si no te importa, entonces está bien. Te haré lo más bonito que pueda"

Keira: "Sí, gracias"

Keira sonrió mientras se imaginaba un maravilloso domingo con el apuesto hombre.

'Estoy nerviosa...'

Ajena a la mirada preocupada de Rose, Keira pensó mucho en sus planes.

'Un dirigible es mejor que un carruaje'

Sería más romántico contemplar la capital desde el aire.

Se reuniría con un hombre que algún día podría convertirse en su amante, pero se preguntó si un lugar lleno de gente les proporcionaría un buen ambiente romántico.

Si fueran sólo ellos dos, podrían tomarse de la mano y mantener una conversación con facilidad...

Después de pensarlo mucho, Keira tomó una decisión, una que preocuparía aún más a Rose.

'Tengo que arreglar un alquiler de un día'

Ella no estaba comprando todo. Ella sólo lo estaba alquilando por un día, así que debería estar bien.

Así, la operación de fingir ser una pobre aristócrata rural fracasó incluso antes de empezar.

'Si un hombre hace algo que no suele hacer, está a punto de morir'

¿Cuál era la razón por la que tales palabras venían a la mente hoy?

Robert, el mayordomo, miraba confundido a la dama que olía las flores del jardín.

Robert: "¿Milady?"

Keira: "Oh, Robert, ¿qué pasa?"

Robert: "¿Es usted, milady? ¿Va a salir...?"

Como si se hubiera dado cuenta de por qué reaccionaba así, Keira dijo, ocultando su vergüenza.

Keira: "No voy a salir. Es que hoy estoy de buen humor"

Keira estaba inusualmente armada. Su cola de caballo, normalmente peinada, estaba medio suelta y adornada con alfileres de gemas de colores. Su ropa también era un poco diferente de lo normal.

A diferencia de su habitual insistencia en llevar una blusa blanca y una pulcra falda larga dentro de la casa, ahora llevaba un brillante vestido azul cielo. El delicado encaje azul cielo hizo que el mayordomo se preguntara por el enorme precio de la ropa. 

Acaba de decir que no tiene que salir, pero ¡también iba maquillada!

No era sólo eso. Sus orejas y su cuello estaban adornados con joyas de oro.

Keira: "¿Por qué? ¿Me veo rara?"

Robert: "Oh, en absoluto. Estás preciosa"

Incluso pudo oler una pizca de un delicado aroma afrutado, seguramente un perfume, de la estimada dama.

Una mujer tan bella como la que se veía sin esfuerzo se volvía aún más bella si decidía arreglarse.

Sin embargo, el problema era...

'¿Por qué hace esto?'

Parecía que la señora se había convertido en una persona diferente desde la semana pasada. Había dejado de repente su trabajo como caballero, ignoraba a menudo las llamadas del Gran Duque y declaraba que participaría en actividades sociales.

Hay un dicho que dice que la gente que hace lo que no hace normalmente está a punto de morir.

El cambio de Keira fue tan notable que Robert pensó en una especulación tan absurda.

Pero la impactante escena no terminó ahí.

La dama tarareaba mientras caminaba, ¡y cogió una flor para ponérsela en la oreja!

'???'

Decenas de signos de interrogación aparecieron en la cabeza de Robert.

'Milady, no tenía este tipo de carácter, ¿verdad?'

Mientras el mayordomo se quedaba sorprendido, Keira se alejaba con una agradable sonrisa en el rostro.

Keira: "Me pongo en marcha"

Robert: "Cuídate"

Salió del jardín, dejando al mayordomo aún en shock.

No sabía por qué, pero el mundo parecía hermoso.

¿Esto era salir con alguien?

Quería estar guapa, así que se arregló por la mañana aunque no tenía pensado salir de la mansión.

Tarareó su paseo. La propiedad de Parvis era muy espaciosa, así que aunque caminara mucho tiempo, no vería el final.

Después de una larga caminata, llegó a los aposentos de los Caballeros. Tal vez sea porque es fin de semana, pero los caballeros llevaban ropa informal, jugaban al sol o no aparecían.

Keira no quería entorpecer su descanso, así que pasó de largo con cuidado. Sin embargo, algunas personas se dieron cuenta de su presencia.

"¿Mi... señora?"

Un ejemplo perfecto fue Sir Joseph, el vice capitán.

Estaba ayudando a los nuevos caballeros a practicar.

Keira miró hacia atrás y respondió.

Keira: "¿Sir Joseph?"

Joseph: "...así que realmente eras tú. Por un momento pensé que me había equivocado. ¿A dónde vas?"

Keira: "Todos se preguntan lo mismo. No voy a salir"

'Eso es porque está vestida para una salida'

Joseph se contuvo de decir sus pensamientos.

Aunque Keira realmente no tenía planes de salir a la calle, en realidad llevaba un traje pensado para una salida. Lo sacó después de un año de guardarlo en el armario.

Cuando Joseph la miró, encontró una flor en su oreja.

"¡...!"

Se quedó aún más sorprendido que antes. Aunque lo mirara de nuevo, definitivamente era una flor en su cabeza.

Joseph: "M-milady... esa flor..."

Tal vez la flor cayó del árbol y se posó en su cabeza. Al menos, eso era más probable que Lady Keira colocara la flor ella misma.

Keira: "Oh, ¿ésta? ¿No es bonita?"

"..."

Sin embargo, el dios de la probabilidad no se puso de su lado.

Qué chica tan feliz, acariciando la flor en su pelo.

Le preocupaba seriamente que la dama se sintiera mal.

Los ojos de los caballeros del cuartel se volvieron lentamente hacia José.

"¿Cuándo fue allí, vicecapitán?"

"¿Quién es esa mujer? Está demasiado lejos para ver"

Los caballeros se preguntaron brevemente quién era la hermosa belleza que estaba de pie junto al vicecapitán, y luego se dieron cuenta de que era la dama.

Y se pusieron rígidos. Cuando los caballeros se congelaron uno por uno, sus miradas se quedaron en un lugar.

"¿Lady Keira? Estoy en lo cierto, ¿no?"

"Debes salir a alguna parte. ¿Vas a una excursión?"

"Vaya, llevas flores en el pelo..."

Keira les sonrió, sorprendiendo aún más a los caballeros. Se quitó la flor de la oreja y la colocó en el cuello de Joseph.

El mismo pensamiento vino a la mente de todos viendo la escena.

'Mi señora, ¿no era usted de ese tipo de carácter?'

Dejando atrás a los asombrados caballeros, Keira se alejó, tocando con la mano las flores con las que pasaba. Incluso parecía tener un pequeño salto en su paso.

No sabían por qué, pero era evidente que la dama parecía feliz.

"Vicecapitán".

"..."

Joseph se quedó con la mirada perdida en la pequeña flor que tenía en la mano.

"¿Señor?"

Joseph: "...¿Sabe alguien del reciente cambio de opinión de la señora?"

"..."

"..."

No podían saberlo.

La mayoría de ellos no han tenido una pequeña conversación desde su última sesión de bebida.

Pero el silencio se mantuvo por un momento.

"¿Tiene un amante?"

"..."

"..."

Un radio de 10 metros se congeló por el comentario irreflexivo de alguien.

Nota Asure:

[1] 안주 (anju) son bocadillos que se sirven con bebidas alcohólicas.

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