HDH 482

Hombres del Harén 482

El invitado no deseado

[Algo pulula dentro de la cueva en la que se aloja Anyadomis]

"¿Qué es ese algo?"

preguntó Latil, desconcertado.

Esa era la parte más importante de la historia, pero el grifo la estaba omitiendo. El pájaro comenzó a saltar mientras expandía sus pequeñas alas.

[No lo sé, Lord. No he entrado en la cueva. Pero tengo la sensación de que no es nada normal. Vi a un hombre sospechoso que se esforzaba por llevar cajas extrañas al interior]

"¿Qué cajas?"

[Parecía que en cada una cabían de cinco a seis cabezas humanas. Anyadomis siempre se queda dentro de la cueva, así que nunca la veo. El hombre va y viene llevando las cajas al interior. Y cada vez que lo hace, el sonido de algo pululando dentro de la cueva se hace más fuerte]

Latil pensó en la historia de Hierlan sobre un cuervo. Pero Anyadomis no podía haber reclutado a un cuervo de verdad. El hombre sospechoso del que hablaba el grifo tenía que ser la forma real del cuervo.

"Ese debe ser el brujo. Oí que un brujo se unió al bando de Anyadomis"

[Si es un brujo, ¡debe estar creando Retchers Oscuros! Por cierto, los Retchers Oscuros son monstruos creados por brujos. Pero los humanos los llaman monstruos igualmente]

Asure: 레처 : lecheo = Retcher o Retadores

Latil se mordió el labio. El brujo que trabajaba para Anyadomis estaba creando monstruos... Era un movimiento sospechoso.

¿Planeaban utilizar monstruos para causar el caos en el mundo humano ahora que habían fracasado en su intento de secuestrar a Tasir?

"Esto no es bueno"

suspiró Latil.

[No me digas que vuelva a echar otro vistazo. No puedo ir sola. Soy demasiado frágil]

Ranamoon echó un vistazo a Latil. Parecía que murmuraba para sí misma mientras miraba al vacío.

Latil sabía que tenía que explicarle las cosas, pero estaba demasiado distraída con la noticia de Anyadomis como para pensar en otra cosa. Latil seguía mordiéndose el labio con ansiedad, Ranamoon acabó alargando la mano para detenerla.

"Te vas a hacer daño"

"Mis labios no son el problema ahora mismo"

Latil dejó de morderse el labio a regañadientes y se agarró al brazo de Ranamoon.

"Creo que Anyadomis se está preparando para atacarnos. Ahora tendrás que entrenar aún más duro, Ranamoon"

No mejoraría milagrosamente con sólo unos días de entrenamiento, pero sería mejor que nada. Latil intentó alejar la desesperanza que se cernía sobre ella.

***

Latil quería hacer algo con Anyadomis de inmediato, pero ya era tarde. Supuso que la mayoría de los demás consortes dormían y regresó a su habitación después de enviar a Ranamoon a la suya.

Pero Latil no pudo dormirse enseguida. Pasó dos o tres horas mirando entumecida al techo.

Cada vez que cerraba los ojos, veía a Anyadomis asaltando el palacio con un enjambre de criaturas malignas.

¿Qué se supone que debo hacer cuando eso ocurra? La mente de Latil estaba entumecida.

Tenía Consortes poderosos. Pero aunque todos ellos se unieran a la lucha, su bando estaría en gran desventaja si los enemigos los superaban en número.

Incluso los Lords despiertos perdían siempre, a pesar de sus increíbles poderes.

Los Lords eran derrotados en parte porque siempre tenían mala suerte cuando luchaban contra el Adversario. Pero la inferioridad numérica también jugó un papel crucial en su derrota.

Esperad. Tal vez tengamos más gente de nuestro lado esta vez.

Pero cuanta más gente tengamos, más gente tendremos que proteger.

Latil estaba casi segura de que podría ocultar su identidad con éxito mientras Emperatriz Aini no siguiera investigándola. El problema era si podría detener a Anyadomis sin ser despertada.

Latil se había ganado su puesto en el trono apartando a Tla, a quien apoyaban la mayoría de los nobles. Su padre dejó en su testamento que deseaba que Lean se convirtiera en Emperador.

Si no podía proteger adecuadamente a su imperio y a su pueblo, sería recordada en la historia como la Emperador que llevó a su imperio a la ruina. Ser conocida como una Emperador cachonda era la menor de sus preocupaciones ahora.

Latil no entendía nada. Era la misma sensación que tuvo cuando se convirtió en Emperador y se enfrentó a problemas sin respuesta.

Latil siguió dando vueltas bajo las sábanas y sólo se durmió al amanecer.

***

A la mañana siguiente, Latil estaba trabajando en la oficina pública.

La fila de secretarios que esperaban para dar informes a Latil momentáneamente se desordenó, ella lo aprovechó para hablar con el Chambelán.

"Marqués Savlé. Anuncie que Anaktcha queda absuelta de todos los cargos. Que todo el mundo sepa que estaba siendo amenazada para cometer los crímenes de los que se la acusaba"

A Marqués Savlé le pilló desprevenido mientras daba órdenes silenciosas a los asistentes. Parecía estupefacto.

"¿Absuelta? ¿Madame Anaktcha? Pero lo que le hizo a Emperatriz Aini durante el Festival de Otoño fue..."

Latil no podía decirle al Chambelán que había hecho un trato con Tla por los esqueletos de Milo, así que tuvo que dar una excusa diferente.

"Obtuve nueva información. Sólo necesito que hagas el anuncio"

En realidad, Latil tenía que hacer más que eso si quería mantener su promesa a Tla. Tenía que preparar una mansión para Anaktcha, para que la concubina pudiera vivir como las demás esposas del difunto emperador. También tenía que decidir algún tipo de pago regular o una lista de bienes para enviar a Anaktcha.

Pero Latil decidió no mencionar nada de eso todavía.

De todos modos, estaba segura de que Anaktcha no iba a ir a palacio en persona. Había una pequeña posibilidad de que pudiera visitarla después de conocer a Tla y enterarse del trato, pero...

'Puede que no venga en persona ni siquiera después de hablar con Tla'

El Gran Chambelán parecía confuso, pero transmitió la orden de Latil a los secretarios.

Tras la ajetreada mañana, Latil pidió a los aliados del Lord que se reunieran en la sala de reuniones del Harén durante la hora del almuerzo.

Tenían mucho que discutir, así que Latil se apresuró a ir allí con Ranamoon.

Pero en cuanto entró en la sala con él, sintió una oleada de preocupación. ¿Alguien iba a poder concentrarse en la reunión de hoy?

Antes de que Latil y Ranamoon entraran, los aliados del Lord se burlaban de Hierlan mientras éste colocaba utensilios de escritura sobre la mesa. Hoy asistiría a la reunión en lugar de Tasir, los demás parecían divertidos por su preparación.

Pero en cuanto vieron a Ranamoon, todos callaron al instante. Las risas animadas se desvanecieron y un silencio incómodo llenó la sala.

Los Consortes intercambiaron miradas mientras Latil tiraba de Ranamoon hacia la mesa.

Gesta miró entre Latil y Ranamoon. Los ojos de Sonnaught se desviaron hacia Kallain. Kallain miró a Girgol.

Meradim miró a Titus.

"Titus ¿estuvo aquí ese hombre la última vez?"

preguntó Meradim, cuestionando su memoria como si no pudiera creer que Ranamoon se les uniera.

Latil fingió no haberle oído y sentó a Ranamoon en el asiento más próximo a ella. Le puso la mano en el hombro y explicó la situación a todos.

"Ranamoon  se unirá a nuestras reuniones a partir de ahora. Le he dicho todo lo que necesita saber"

Los aliados del Lord parecían alarmados, sus ojos empezaron a desviarse más rápidamente. Pero nadie dijo una palabra.

Tasir se habría presentado amistosamente y habría entablado conversación con todos a pesar de la tensión que reinaba en la sala. Pero esto era Ranamoon, él no era nada de eso. El aire se enfrió aún más.

Latil esperaba que todos intercambiaran saludos agradables y le dieran la bienvenida a Ranamoon, pero se limitaron a mirarse unos a otros sin decir palabra.

"Deja de mirar así. Si tienes preguntas, hazlas. Tenemos muchas cosas importantes que discutir hoy, ahora mismo hay demasiada tensión en el ambiente"

amonestó Latil mientras se sentaba a la cabecera de la mesa.

Sonnaught pareció entenderlo como un permiso y habló primero.

"¿Por qué se une Ranamoon a nuestra reunión, Majestad? Es el Adversario"

"Acabo de explicárselo. Le he dicho todo lo que necesita saber"

dijo Latil con brusquedad.

"Pero él es el Adversario"

replicó Sonnaught sin perder el ritmo.

No dijo gran cosa, pero su breve comentario dejó claro que Ranamoon era el más raro. Latil miró largamente a Sonnaught.

"Es peligroso decirle la verdad"

insistió Sonnaught, lanzando una mirada gélida hacia Ranamoon.

"Sir Sonnaught. Ya le he dicho muchas cosas"

"Eso no se puede evitar, entonces. Pero no debería asistir a nuestras reuniones. Debe mantener las distancias con él, Majestad"

Latil iba a decir algo, pero Meradim intervino.

"Lord, estoy de acuerdo en que no debemos dejarle entrar aquí"

Titus asintió con entusiasmo detrás de él. Latil no había esperado que Meradim se opusiera. Frunció el ceño y miró entre Meradim, Titu y Sonnaught.

"Ahora mismo, cada aliado cuenta. Además, Ranamoon es una de las dos personas que pueden matar a Anyadomis. Creo que eso lo hace más que cualificado para unirse a las reuniones"

"Pero no ha traído aquí a Emperatriz Aini, Majestad"

"Porque no podemos llamarla exactamente nuestra aliada, Sir Sonnaught"

Después de hablar severamente con Sonnaught, Latil miró a Gesta, Girgol y Kallain. No habían dicho nada hasta el momento.

Gesta tenía los labios apretados y miraba nervioso a su alrededor. No parecía que fuera a expresar su opinión, pero no parecía muy contento con la presencia de Ranamoon.

Girgol apoyaba la barbilla en la mano, divertido.

Latil sabía que no iba a estar ni de acuerdo ni en desacuerdo.

Kallain sorbía café con los ojos bajos, pero Latil podía ver sus cejas fruncidas tras el borde de la taza.

Las inesperadas objeciones agriaron el humor de Latil. Sólo había pensado en que Ranamoon la rechazara a ella, no en que todos los demás lo rechazaran a él.

Kallain se dio cuenta de su expresión y dejó la taza de café.

"Yo también estoy un poco preocupado, ama"

dijo con cautela.

"Ranamoon no es de los que traicionan a nadie. Ya lo sabes"

"No es que no confíe en Ranamoon. Es que no confío en el destino de los Adversarios que se han opuesto a los Lords a través de las generaciones"

Latil se sintió abatida. Tenían que empezar a hablar de Anyadomis, pero todos se oponían demasiado a Ranamoon. No había esperado que actuaran así cuando él se unió a su reunión.

Afortunadamente, Ranamoon se mostró indiferente como de costumbre y dejó que la oposición de todos le entrara por un oído y le saliera por el otro. Pero Latil no estaba seguro de cuánto tiempo más iba a tolerarlos.

Ella había pasado por mucho para traer a Ranamoon a su lado.

Ahora se sentía contrariada por la fuerte oposición de las consortes a pesar de sus esfuerzos.

"Es la primera vez que hay dos Adversarios. Y la primera vez que el Adversario anterior ha ocupado el cuerpo del Lord anterior. Creo que deberíamos estar abiertos a la idea de que Ranamoon se una a nuestro bando a pesar de ser el Adversario. Hasta ahora no nos ha hecho ningún daño"

"Pero lo hará en el futuro"

"Sir Sonnaught, el que está haciendo daño ahora mismo no es Ranamoon. Son todos ustedes los que están causando una fisura en nuestro grupo"

espetó Latil con frialdad.

Sonnaught dejó de hablar. Pero todos parecían más incómodos que antes. Su oposición se sentía aún más fuerte ahora.

"Tasir es un humano, pero ha sido el que más nos ha ayudado de todos. Desearía que no rechazaras a Ranamoon sin razón"

"Pero mi querido hermano no es el Adversario"

argumentó Meradim, hablando a favor de Tasir y trazando una línea a Ranamoon.

Ahora Latil se sentía incómoda. Se sintió aliviada cuando Ranamoon fue tan comprensivo con su secreto y accedió a ayudarla.

Por fin había conseguido atraerlo a su lado, pero ahora todos hablaban mal de él en su cara.

Latil sintió que la rabia bullía en su interior, amenazando con estallar.

Podrían haber hablado con ella en privado después, cuando Ranamoon no estuviera cerca. ¿Por qué tenían que decírselo cuando aún estaba con ellos?

Y Girgol estaba igual que los demás. El desobediente vampiro parecía divertirse, pero su silencio significaba que estaba descontento con la situación a pesar de su diversión.

Ranamoon observaba a todos en silencio todo el tiempo, con un aspecto sorprendentemente imperturbable. Pero justo entonces, finalmente abrió la boca para decir algo.

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