EGDLV 102

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Jueves, 18 de Noviembre del 2021




El Guía de la Villana 102

El amor del Bárbaro (4)


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El cochero llevó a Lara y a Demian al bosque de las afueras de Dandelion. Como estaba nevando, el frío hacía que hubiera poca gente en la calle. Sólo se oía el sonido de su carruaje en la carretera vacía.

Lara detuvo el carruaje dentro del bosque. Tomó la mano de Demian y le dijo al cochero.


"Por favor, espérenos aquí"

"Sí, milady"

"Hace frío, así que descansa dentro del carruaje"


Lara llevaba un pesado abrigo y una gruesa capa. Hizo que Demian se pusiera la misma capa. Luego, se adentraron en el profundo bosque.

"Me siento como si me hubieran secuestrado"

"¿Cómo lo sabes?"

Lara sonrió. Cada vez que los dos pisaban la nieve, se escuchaba un sonido crujiente.

"¿A dónde vamos?"

"Donde no hay nadie"

"Aquí ya no hay nadie, Lara"

"Donde no hay estrellas ni luna"


La voz de Lara sonaba como una canción. Demian decidió no hacer más preguntas. Un dulce calor surgió de la mano que agarró. Quería tocarle los dedos, quería hacerle cosquillas en la muñeca y barrerle los hombros. Quería escuchar los latidos de su corazón y respirar al compás de ellos. Mientras tenía esos pensamientos, Lara le habló de repente.


"Tengo una pregunta"

"Pregúntame"

"¿Quién te dio tu nombre?"


Preguntó Lara. Ella caminaba por el denso bosque de árboles. Un pequeño copo de nieve que caía entre las ramas se deslizaba por su capa.

Demian respondió.


"Yo"

"¿Te nombraste a ti mismo?"

"Yo no lo diría así. Simplemente se me ocurrió un día. Fue como si alguien... me hablara de un pasado que ni siquiera recuerdo"

"Escuché que viste al demonio en persona en el Norte"

"Lo vi"

"¿Cómo te sentiste?"


Demian recordó al demonio que encontró en el Norte. Pelo blanco revoloteando como un fantasma, velocidad y fuerza que los humanos no podían seguir, e incluso tenía la apariencia de una mujer hermosa.

En principio, lo normal era que los depredadores no se disfrazaran. Pero este demonio era extraño, mientras cazaba, disfrutaba distrayendo a los humanos usando la forma de una hermosa mujer.


"Estaba enfadado"

"¿Por qué?"

"No lo sé. Sólo tenía la idea de que tenía que luchar contra ella y ganar. Me siento mal por Acerus por decir esto, pero acabé salvándolo mientras me enfrentaba a ella"

"¿Ganaste?"

"Si"


Esta vez, Lara se sorprendió. Detuvo sus pasos y le devolvió la mirada, su pálido rostro parecía algo sonrojado. Demian le puso las palmas de las manos en las mejillas y derritió su gélida figura. Lara volvió a preguntar.


"¿La has matado?"

"No"

"¿Por qué?"

"Porque ella juró obedecerme"

"Por qué... ¿Quién y por qué? ¿Qué te hizo el demonio...?"

"Ella dijo que me obedecería"

"Así que la perdonaste"

"Sí"


Demian no se lo contó a nadie, había presagiado que algo problemático estaba a punto de suceder. En cambio, le dijo a la demonio del norte que no se desbocara y ella hizo lo que él le dijo.

Lara levantó la cabeza y miró el rostro de Demian. Sus ojos rojos miraban fijamente a los ojos azules oscuros de él.


"Demian"


Era una voz llena de convicción.


"Me gustas"

"¿Lara?"

"¿Sabes cuánto me gustas?"

"Lara, ¿qué pasa?"

"Aunque me digas que me muera aquí y empiece de nuevo, puedo hacerlo. Puedo beber esa poción negra de nuevo. Si terminas como lo que vi... puedo volver a empezar diez veces, no, veinte veces"


El rostro de Demian brilló, luego se oscureció de nuevo. La luna -revelada a través de las nubes- jugaba al escondite sobre ellos. Nevó, luego dejó de hacerlo y volvió a nevar.

Demian metió la mano de Lara dentro de su ropa. Luego, tiró de su cintura y la abrazó.


"¿Me estás probando para ver qué puedo hacer por ti?"


Los ojos de Lara temblaban salvajemente. Se calmó en los brazos de Demian y respiró profundamente varias veces. Luego, le dijo como si le estuviera notificando.


"Podrías convertirte en un demonio algún día"

"¿Qué?"

"En el futuro vi... que eras un señor demonio y llevabas este mundo a la destrucción"


Demian no podía entenderla. Sin embargo, al escuchar las siguientes palabras de Lara, se abstuvo de negarlo.


"Sucedió después de que me suicidara"

"Lara"

"Se decía que los demonios se hacen fuertes comiendo a otros demonios. Creo que la razon por la que Valac esta tras de ti es porque sabe quien eres realmente"

"Puedo lidiar con él"


Dijo en voz baja. Por supuesto que sí. Según Acerus, Valac era más débil que Lilith. Y Lilith era más débil que Demian.

"Si te conviertes en el señor de los demonios, debo matarte en el nombre de Dios"

"Lara"

"Así que me quedé pensando. ¿Qué debo hacer para evitar que te conviertas en el señor de los demonios? ¿Sólo necesito vivir y no morir? Si nada de lo que haga puede detener tu destino..."


Lara agarró su cuello y lo acercó.


"¿Lo sabías? ¿Ya te has dado cuenta de que no eres humano?"


Demian asintió lentamente. Era imposible no saberlo. Sólo su apariencia era igual a la de los demás humanos, todo lo demás era diferente. No sabía desde cuándo, probablemente fue antes de ser adulto, pero Demian ha vivido su vida sin pensar en sí mismo como un ser humano. Así que llegó a ver todo en este mundo por separado de él mismo. 


"Me pareció raro. La gente se resfría cuando el tiempo es seco y se intoxica al comer alimentos en mal estado. Pero yo nunca he estado enfermo en toda mi vida"

"¿Ni siquiera una vez?"

"Nunca"


Había algo más. Demian confesó el sentimiento de desubicación que había sentido todo este tiempo.


"Nunca he derramado lágrimas"


Esa era una pregunta tan grande como el amor para Demian. Dijo que no recordaba haber sentido nunca amor por nadie ni por nada antes de conocer a Lara, lo mismo ocurría con el sentimiento de tristeza.


"Cuando un camarada muere durante una guerra o cuando alguien presencia una escena trágica... Un humano normal lloraría"


Había muchas formas diferentes de tristeza, como las lágrimas silenciosas, los aullidos y las rabietas, o romper y llorar de rodillas. Pero Demian no lloraba. Y mucho menos lloraba, Demian nunca había tenido el corazón roto.


"Hay muchas cosas que no tengo"


Demian no sentía el deseo normal como un ser humano, no porque fuera un esclavo, sino porque nunca fue siquiera humano.

Pero ya no. Había cambiado. Lara miró los ojos de Demian. El profundo color azul la cautivó y no la soltó. Se asomó al infinito misterio que había en su interior.


"Tienes amor"


Ante las palabras de Lara, Demian asintió con la cabeza. Dijo que sabía que el sentimiento que sentía por Lara era lo que la gente llamaba amor.


"También tienes deseos"


El amor también se manifestaba como deseo. Especialmente el amor entre un hombre y una mujer. Incluso en este momento, el cuerpo de Lara respondía constantemente a la temperatura corporal y al movimiento de Demian. Su cuerpo estaba ansioso por acercarse, así como el de él.


"No te mataré"


Las palabras de Lara de querer ir a un lugar donde no hubiera estrellas ni luna eran sinceras. Ella sabía que el Dios del Destino podía vigilarla en cualquier momento y en cualquier lugar.

Ella no podía evitar los ojos del Dios solo por entrar en el bosque profundo pero al menos podía transmitir su propia voluntad de que no quería ser descubierta.


"No importa si eres un demonio. Incluso si estás destinado a ser el señor de los demonios, no importa. Hay cosas más importantes que tu identidad o el hecho de que sea una santa.

"Lara"

"Nunca dejaré que el hombre que amo caiga en la tragedia dos veces"


Ella desperdició una vida para darse cuenta de que realmente lo amaba. Ella no volvería a cometer el mismo error.


"Demian, ¿me amas?"

"Tanto que puedo destruir el mundo"


Lara abrió ligeramente la boca.

Haah. 

Su aliento caliente fluyó a través de sus gruesos labios. El calor que había calentado su corazón se escapó por su boca.

Lara se dio cuenta de que estaba tan loca por Demian que no podía ir en contra de sus sentimientos aún sabiendo que era un demonio. El Dios del Destino había elegido a la santa equivocada. Lara no era alguien justo y heroico.

Incluso en este momento, ella podría evitar los ojos de Dios o hacer cualquier cosa para engañar a Dios sólo por este hombre.


"Lara"


La voz de Demian era como música. Una música sensual y adictiva que ella nunca había escuchado. Aunque él repitiera las mismas cosas durante toda la noche, ella no se cansaría de él.


"Si me convierto en una existencia diferente y me convierto en el señor de los demonios que destruye las cosas que amas..."


Demian no lo negó, no le dijo a Lara que tal cosa no sucedería. Solo dijo esto.


"Mátame con tu mano"

"¡Demian!"

"Entonces, no tendrás que empezar tu vida de nuevo"


Demian susurró.


"Ahora lo sé. Ese karma que acumulé después de convertirme en el señor de los demonios y destruir el mundo... Eso es lo que te envió de vuelta. Así que... Si muero en tus manos, puedo salvarte a ti y al mundo"


Eso no iba a suceder. Incluso si ese fuera el caso, no podría ser posible. 

Si tuviera que matarte, moriría contigo.

se dijo Lara.

Cuando levantó la vista, Demian estaba sonriendo. 

Mostró una sonrisa agradable pero ligeramente dentada antes de bajar suavemente la cabeza para mirar el rostro de Lara. Luego, le dio un profundo beso en la mejilla y le dijo,


"Está bien"

"Demian..."

"Incluso en este momento, soy mucho más feliz siendo el hombre que amaste en tu pasado"


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