DHSLV 162

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Domingo, 11 de Septiembre del 2022



De hecho, soy la verdadera 162



Keira: "Ugh"


La sensación era la misma, aunque fuera la segunda vez. Se sentía como si su estómago estuviera al revés.


Keira: "Blergh..."


Después de caer al suelo y vomitar durante un largo tiempo, Keira fue finalmente capaz de volver a sus sentidos.

Ella vio una gran pared de la fortaleza cuando miró hacia arriba. No era muy diferente del castillo de su ciudad natal en la capital.

...Mientras pensaba en ello, una corona alineada frente a la puerta le llamó la atención.

Había demonios alados, con cabezas de animales en el cuello, criaturas de cuatro patas, con cinco colas en el trasero...

Volvió a darse cuenta de que no estaba en el mundo humano. Asustada, Keira miró a su alrededor.


Erez: "Oh, ¿estás bien ahora?"


Erez se acercó y preguntó.


Keira: "Esto es..."

Erez: "Está frente al puesto de control. No podemos teletransportarnos al castillo"


Los ojos de Keira se volvieron hacia el grupo que hacía cola, aparentemente esperando el puesto de control.

Una de cada cinco personas parecía un ser humano normal.

Sin embargo, los demonios del bosque reconocieron inmediatamente que era humana. Eso debe significar que ella tenía algo que les facilitaba darse cuenta de que no era uno de ellos.


Keira: "¿Está bien que sea así? Se mire como se mire, soy diferente"

Erez: "No pasa nada si vas conmigo. Pensarán en ti como mi presa o sirviente"

"..."


Ella no sabía si la idea era tranquilizadora o no...

Cuando se levantó, cepillándose la ropa, Erez se dirigió directamente al guardia en lugar de hacer cola en el puesto de control.

Lo que se veía bajo el casco del guardia era un esqueleto sin carne. Dios mío. Keira se sobresaltó y se quedó sin palabras.


《¡Tú ahí! ¿Qué haces sin hacer cola? 》

《¡Ni siquiera hicieron cola con este sol abrasador!》

《¿Quiere que le vuelen la cabeza?》


Las voces de los que estaban en la cola se hicieron más fuertes.

Era la primera vez que Keira escuchaba el idioma, así que no podía entenderlo realmente, pero estaba claro por el tono áspero que no estaban contentos.

Erez no les hizo caso, sacó algo de su bolsillo y se lo mostró al guardia.

Entonces el soldado esqueleto se dio un golpecito en la barbilla y respondió.


《Oh, ¿qué estás haciendo aquí? Como eres así, no te he reconocido. Además, ¿por qué tienes esa figura?》


El esqueleto no parecía tener cuerdas vocales, y Keira no podía saber de dónde procedía su voz. Así que renunció a tratar de adivinar.


《Si volviera a mi forma original, se asustaría.》

《Aha, eres inesperadamente considerado con tus sirvientes.》


El soldado esqueleto devolvió su placa de identificación y escribió algo en el archivo. Luego, tocó el timbre y despejó el camino.


Erez: "Todo ha terminado, así que ven aquí"

Keira: "¿De qué estaban hablando? En el medio, me miraron"

Erez: "Mencioné que tengo un acompañante, así que les pedía que te dejaran entrar a ti también"


No mencionó la charla sobre que Keira era su sirvienta.


Erez: "Ahora que lo veo, debe ser incómodo que no sepas hablar nuestro idioma. Espera, te haré un hechizo de interpretación"


Erez golpeó ligeramente la frente de Keira. Cuando Keira iba a protestar por el contacto, empezó a oír las voces de la multitud.


"¡Tú, congelado allí! ¿Qué haces sin quitarte de en medio?"

"¡Deprisa, deprisa!"


Empezó a entender lo que decían.

Magia de traducción, ¿eh? Había muchas cosas extrañas en la magia de los demonios, pensó Keira mientras se frotaba la frente.


Erez: "Por aquí"

Keira: "Ah, claro"


Siguió a Erez mientras caminaba. Pero había una cosa curiosa: había muros, pero no puertas.

¿Tenemos que caminar mucho para llegar? ¿No suelen estar los puestos de control delante de la puerta?".

La respuesta llegó pronto. Cuando Keira se dio la vuelta para ver una luz brillante que parpadeaba desde un lado, varios guardias estaban vigilando un lugar un poco alejado del puesto de control.

¿Por qué están parados frente a nada?

Al inspeccionar más de cerca, Keira vio un círculo mágico en un idioma irreconocible a sus pies.

El que llegó antes que Keira se paró sobre él. Al momento siguiente, una luz amarilla parpadeó, y su cuerpo desapareció como el humo.

Por eso las puertas no existían. Para empezar, no había necesidad de una.

La cabeza de Keira palpitó ante el choque cultural. Erez tiró de Keira, que estaba de pie, y la hizo ponerse de pie en el círculo mágico.


Erez: "Es una distancia corta, así que esta vez no te marearás"


De nuevo, la luz amarilla parpadeó. Cegada por la luz, Keira cerró los ojos por un momento y los abrió para ver una carretera de ladrillos.

Grandes edificios se alineaban a ambos lados del bulevar. Parecía el centro de una ciudad bulliciosa.


Erez: "Esto es todo. No se puede usar la magia de teletransporte dentro del castillo, así que tendremos que caminar un poco"


Keira caminó con Erez y miró a su alrededor. Era bastante diferente de donde ella vivía, pero era difícil apartar los ojos del maravilloso estilo arquitectónico.

Cuando Erez hablaba del reino de los demonios, Keira se imaginaba una tierra rocosa con lava fluyendo por todas partes, así que no pudo evitar sorprenderse ante la vista.

Erez aparentemente leyó sus pensamientos y dijo.

Erez: "Sólo es así dentro del castillo. El exterior no tiene ley, como la primera vez que caíste. Fuera del castillo, no hay ley. Así que ten cuidado de no salir del castillo por casualidad".

El bosque vino a la mente de Keira. Así que todo era así fuera del castillo...

'Tendré que arreglar el asunto y volver'

Tenía una razón más para volver antes. Afortunadamente, esta no era una zona sin ley...

'Espera'


Keira: "Si hay reglas en el castillo, ¿significa que hay alguien que los castigará por infringir la ley?"

Erez: "Por supuesto"

Keira: "Entonces debe ser el gobernante de esta ciudad. Como no hemos venido a hacer turismo, debe ser él a quien querías que conociera"

Erez: "Así es"


Respondió y señaló con el dedo en la distancia, donde se encontraba un castillo en medio de la ciudad. Aunque estaba bastante lejos, Keira pudo ver algo que se alzaba en lo alto de la aguja.


Erez: "Nos está esperando allí"

"..."


Al oír eso, Keira tragó saliva.


Keira: "¿A qué estamos esperando?"


Keira refunfuñó mientras se sentaba en el sofá.

A pesar de esperarnos, el gobernante nos pidió que esperáramos un rato porque tenían algo que hacer.

Keira estaba descontenta, quería volver cuanto antes, pero perseveró cuando le dijeron que sólo tenían que esperar medio día.

Erez alquiló una posada en las afueras de la ciudad para poder esperar.

Al final, no pudo volver a casa hasta la noche siguiente.

Cuando salió de la posada, el cielo estaba completamente oscuro. La noche del reino de los demonios era excepcionalmente oscura, probablemente debido a la falta de luna.

Ni siquiera había algunas luces encendidas de camino al lugar de encuentro, por lo que Keira estuvo a punto de tropezar varias veces.

Después de estar a punto de caer por décima vez, preguntó impaciente.


Keira: "¿Cuánto falta?"

Erez: "Ya casi"


El castillo interior tenía una estructura rodeada por un bosque, sin ningún muro que separara el interior y el exterior de la fortaleza.

'Es una estructura muy singular. Hay un bosque en el castillo...'

Los árboles del jardín habían crecido tan densamente que los pisos inferiores del castillo apenas eran visibles. Sólo la aguja puntiaguda asomaba la cabeza.


"Miau"


Fue entonces cuando Keira escuchó el grito de un gato. Keira, mirando la aguja del castillo, giró rápidamente la cabeza.

'¿De dónde viene eso?'

Ella no podía ver al gato debido a lo oscuro que estaba. Realmente no le importó, así que rápidamente se encogió de hombros.


Erez: "Aquí".

"Miau"


Entonces oyó el gato de nuevo. Estaba más cerca que antes.

'¿Dónde está?'

Si podía oírlo tan cerca, debía estar cerca, pero Keira no podía ver nada. Erez miró con curiosidad a Keira mientras ella miraba a su alrededor.


Erez: "¿Qué estás buscando?"

Keira: "Llevo oyendo ruidos de gatos desde hace un rato..."

Erez: "Es este"


Volvió la mirada hacia donde señalaba Erez y vio una criatura con armadura bajo la farola.

Era la armadura que llevaban los esqueletos del puesto de control.


"Miau"


Sin embargo, al quitarse el casco, no era un esqueleto, sino un gato con un pelaje naranja y esponjoso.

El soldado gato se acercó a Keira con el casco de su lado.


"Miau"

Keira: "......¿Qué quieren decir?"

Erez: "Sólo tienes que ofrecerles tu mejilla"

"...?"


Al hacerlo, el soldado felino la besó en la mejilla. 

Fue una suerte que fuera un gato y no un esqueleto. No podía imaginarse a una calavera besando su mejilla.


"Miau"


El soldado gato también besó a Erez en la mejilla y volvió a ponerse el casco. Incluso agitó su pata delantera para saludar.

¿Qué acaba de pasar? Keira siguió a Erez hacia el bosque, un poco aturdida.

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