DHSLV 156

DHSLV 156

Jueves, 25 de Agosto del 2022



De hecho, soy la verdadera 156



Poco después de que Cosette se fuera, el Conde Weinberg se suicidó. Es demasiado astuto para ser una coincidencia.

Además, es imposible que no supiera que contactar con criminales sin permiso causaría problemas más adelante.

Sin embargo, seguir adelante significa que había una razón para hacerlo.

Un secreto que debía permanecer oculto hasta el punto de tener que matar a su aliado por miedo a que se filtrara.

La única conclusión que se les ocurrió fue que el Conde Weinberg fue silenciado porque conocía su verdadera identidad.

'¿Pero está bien matar así al contratista? ¿O es que el verdadero contratista se esconde en secreto para ocultar su identidad...? ¿O estaba tratando de ayudar al Conde a vengarse...?'

Su cabeza se sentía como si estuviera a punto de explotar. Un gemido escapó de su boca.


Zeke: "¿Noonim? ¿Estás bien?"

Keira: "He estado pensando en muchas cosas. Por ahora... No, Cosette está en custodia. No tenemos que preocuparnos de que haga más movimientos"


El problema era que el testigo más fuerte había muerto. Haa, Keira suspiró de nuevo.





Ding, ding, ding-





Entonces la campana volvió a sonar, anunciando el fin del funeral. Los dolientes comenzaron a prepararse para su partida.

Algunas personas incluso se acercaron a Keira y Zeke justo antes de que se fueran para expresar sus condolencias.


"Ya se ha ido a un lugar mejor"

"El difunto velará por su señoría"


Keira expresó mecánicamente su gratitud y se ocupó de ellos.

Cuando el funeral terminó, por alguna razón, se sintió deprimida.

Cosette estaba detenida en un pequeño ático en un anexo. Los guardias vigilaban la puerta durante todo el día, por lo que no podía dar un solo paso fuera sin permiso.

Tomaron esas medidas porque creían que si se le daba rienda suelta, las pruebas de la casa podrían ser destruidas.

Era una habitación muy cutre para una dama noble, pero Cosette permaneció indiferente.

Los guardias de la puerta principal se sobresaltaron y murmuraron entre ellos.


"Normalmente, en este caso, no se ponen como locos y gritan algo así como "¿Cómo te atreves a tratarme así?"... Es increíble"

"Ella creció viviendo como una plebeya. Tal vez sea por eso"

"¿No se vuelven más snobs cuando han vivido originalmente así?"


La charla fue interrumpida por el sonido de los pasos de alguien. Al volverse hacia el sonido, se encontraron con un rostro familiar que caminaba hacia ellos.

Los guardias se inclinaron y saludaron.


"¡Su Excelencia, el Gran Duque!"


Habían oído que alguien venía a investigar la mansión, pero no sabían que sería Ludwig.

Ludwig saludó con la cabeza a los soldados y entró en la habitación. 

Cuando la puerta se abrió, Cosette, sentada junto a la ventana leyendo un libro, giró la cabeza.


Cosette: "¿Su Excelencia?"


Pronto, tanto el asombro como la alegría se extendieron por su rostro.

Se levantó de un salto y le saludó, levantando ligeramente el dobladillo de su falda.


Cosette: "No sabía que vendríais en persona"

Ludwig: "Ya no me llamas con palabras vacías como 'Padre'"

Cosette: "No sé de qué estás hablando. Me dijiste que no te llamara así. Solo sigo tus órdenes... ¿Hay algún problema?"


La expresión de Ludwig se endureció ante su socarrona respuesta.

Con los brazos extendidos, Cosette dijo.

Cosette: "No sé en qué estabas pensando al venir aquí, pero mira todo lo que quieras. Está bien que interrogues a las criadas. Haz lo que quieras"

"..."

Cosette: "No saldrá nada de lo que puedas imaginar"

Ludwig: "No te hemos dado tiempo para destruir pruebas, pero estás muy tranquila"

Cosette: "No tengo que deshacerme de cosas que no existían en primer lugar. No tengo ninguna duda de que Su Excelencia realizará una investigación justa"

Ludwig: "...hablas bien"


Ludwig se dio la vuelta. Un golpe seco y la puerta se cerró de golpe.

En cuanto confirmó que estaba sola, la expresión de Cosette se arrugó como un periódico.

'Ese bastardo...'

¿Por qué hacía esas cosas a pesar de que ella le había dicho que no se moviera sola?

Cosette sintió que quería sacar el cadáver ya enterrado en la tierra y volver a cortarlo.

Habría sido un desastre que él divulgara algo sobre su identidad durante el proceso de interrogatorio.

Así que lo mató. Más exactamente, le animó a cometer suicidio.


"Él no es el contratista, así que no tengo la obligación de protegerlo"


Bueno, aunque lo fuera, ella seguía sin tener la obligación de protegerlo. Lo importante era cumplir fielmente el contenido del contrato.

Después de esto, la reputación y el estatus de la familia Weinberg no eran de su incumbencia.


"Primero, tengo que encontrar la piedra espiritual"


Su expresión se distorsionó aún más cuando recordó su objetivo original.

Fingió ser lo más despreocupada posible frente a Ludwig, pero su corazón ardía de ira.

Las cosas se están complicando cada vez más'.

Según su plan original, ya debería haber descubierto la ubicación de la piedra espiritual y jugar con los enemigos del contratista con facilidad.

Pero no había conseguido ninguno de los objetivos que se había propuesto durante un año. No tendría ninguna cara que mostrar al reino de los demonios si lo descubren.


Cosette: "En primer lugar, encontrar la ubicación de la piedra espiritual ... No, mejor aún. ¿Cómo voy a moverme en esta situación?"


Debido a lo que Isaac había hecho, la gente empezó a mirarla con recelo. Ella estaría en el ojo público no importa lo que ella hizo. Podrían atraparla si se apresuraba a moverse.

Cosette se mordía nerviosamente las uñas y chasqueaba la lengua.


Cosette: "Tsk"

Keira: "No esperaba que saliera nada"


Incluso después de registrar toda la casa de los Weinberg, las villas repartidas por el país, e incluso las casas de los familiares, no se encontró ninguna prueba plausible.

Encontraron pruebas de corrupción menor, pero Keira quería algo más que pruebas de malversación.

El diablo. Magia negra. Un contrato.

Un golpe decisivo que pudiera hacer caer a Cosette. 

Parecía que iban a captar una pista que desaparecería como un espejismo. Keira suspiró y se sentó en el sofá.

'...¿Y ahora qué?'

No hace mucho, estaba casi segura de que el contratista de Ragibach era el Conde Weinberg.

Sin embargo, parecía que estaba equivocada ya que lo desechó sin dudarlo.

'Pero, si había un contratista, pensé que sería un miembro de esa familia...'

Ella no esperaba que saliera un libro sobre magia negra, y mucho menos una revelación sobre la identidad del contratista.

Mientras agonizaba durante un largo rato, recordó sin querer la propuesta de Erez.


Erez: "Ya está bien. Entonces, ¿por qué no conoces a alguien que crea en mí?"

Erez: "Hay alguien que deberías conocer para el plan B. Seguro que te ayudará"


Sucedió que la situación era apropiada. Cosette llevaba un tiempo retenida en la mansión, por lo que sería difícil que notara su ausencia.

Incluso si lo hiciera, Cosette no podría conspirar contra Keira ya que estaba bajo vigilancia.

El reino de los demonios. Un mundo desconocido donde podrían existir peligros...

Aunque Erez la acompañara, su ansiedad no desaparecía.

'Por eso quería encontrar pruebas de magia negra en la mansión de Weinberg...'

Ya que las cosas se habían convertido en esto, ella no tenía más remedio que aceptar su propuesta.

'Entonces, por dónde debo empezar a prepararme...'

Keira se golpeó la cabeza pensando.

En primer lugar, tenía que inventar una excusa para salir de la capital por un tiempo. 

En el caso de Zeke y Sir Joseph, ella podría decir simplemente: "Tengo algo que debo confirmar. Por favor, confíen en mí".

Además, no se podía confiar en todos los empleados. Crear una excusa para salir de la capital era una necesidad.

¿Cómo podría ocultar su existencia durante un tiempo sin que el público sospechara?

'Sería mejor no dejar que el mundo exterior sepa que me he ido. Después de todo, rara vez aparezco en los círculos sociales, así que nadie pensaría que es extraño que no aparezca durante un tiempo'

Además, el incidente con su abuelo ocurrió hace poco, así que sería menos probable que socializara. 

Pero, ¿y si alguien pregunta por su paradero?

'Entonces, ¿por qué no voy por ahí diciendo que dejé la capital por un tiempo para recuperarme?'

Lo sentía por el fallecido, pero parecía que esta vez tenía que volver a utilizar la muerte de su abuelo como excusa.

La muerte de su abuelo la conmocionó, sobre todo porque fue un asesinato cometido por un noble de alto rango, así que dejó la capital por un tiempo para recuperarse.

'Pero Cosette podría dudar de que me fui para recuperarme...'

Probablemente no se enteraría de la noticia, ya que estaba bajo vigilancia y carecía de personal, pero eso no significaba que Keira no debiera estar atenta.

Sería mejor mantener en secreto, en la medida de lo posible, que ella ha dejado la capital.

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