PSUF 195

¿Podemos ser una Familia? 195

Destino  (2)

Traducción Coreano - Español: Asure

Raws: Asure

"Tú también ......."

Nyx chasqueó la lengua y estaba a punto de extinguir a Nyarlatotep con su prisión, cuando Lark extendió una mano para detenerlo.

"Antes de que lo hagas, necesito preguntarte algo"

"¿De qué se trata?"

"¿Qué ocurre cuando dos encarnaciones tienen hijos?"

Lark estaba seguro de que su hija y Creed se casarían.

¿No podría haber un bebé entre ellos? Ése era el problema. Sólo podía haber una encarnación de un dios.

Nyx respondió.

"Entonces tú serías mi encarnación. Tú eres un semidiós, yo soy superior, un dios completo en la mismísima Divinidad"

Y el bebé, más débil que Navia, seguramente moriría.

"Hmm, eso pensaba"

Lark asintió con indiferencia, luego continuó.

"Así que, sólo una ley más, ya sabes esa cláusula, un dios, una encarnación. Que sea prohibida para mi hija"

Nyx se quedó muda por un momento, luego abrió la boca lentamente.

"¿Estás loco ......?"

No iba a saltarse así las leyes del reino humano.

"¿Para eso has venido hasta aquí?"

Lark frunció el ceño, como si preguntara lo obvio.

"¿Crees que habría traído a un humilde Nyalatotep hasta aquí en mi tiempo libre?"

Por una vez, Nyx se quedó sin palabras.

Lark chasqueó la lengua y levantó las manos.

"Tengo conciencia, no te pido que hagas esto. ¿Por qué habría traído aquí a Nyalatotep en lugar de aniquilarlo?"

Miró de nuevo a Nyalatotep, que había permanecido en silencio hasta ahora, observando cada uno de sus movimientos.

"Oye, dame algunas ubicaciones para que pueda construir la divinidad"

Para construir la divinidad, se refería a matar.

Lark añadió como una ocurrencia tardía.

"Si no hablas, no morirás en paz"

Esto significaba que seguirían golpeándolo hasta que muriera.

- Las ubicaciones son .......

Nyalatotep les contó todo lo que sabía. Nyx estaba estupefacta por su incuestionable cooperación.

Lark buscó una goma de pelo en el bolsillo y se recogió el cabello rebelde en un moño.

Estaba listo para la batalla.

"Supongo que unas cuantas cabezas de dios pueden arreglar la ley, ¿no?"

"No. El problema no son las cabezas de dios, ¡sino la reacción conservadora de los dioses!"

"Si es así, tú y yo podemos convencerles de que no lo hagan"

"¡Cuál es la historia, te van a ganar!"

Lark no contestó, sólo se encogió de hombros.

Nyx soltó un aullido y se agarró la cabeza. Si decía que no, iba a castigarlo personalmente y a obligarlo a hacerlo de todos modos.

Así que vamos a convencer a los otros dioses.......

Lark sonrió satisfecho ante la expresión de Nyx.

"Adiós entonces"

Necesito terminar con esto y jugar con mi hija.

Los pasos para matar al dios eran ligeros.

* * *

Pasó un día después de la partida de Lark al Reino de los Dioses.

El cuerpo del Emperador fue colocado en un ataúd y llevado a la capilla del palacio, los dolientes comenzaron a llegar.

El palacio se llenó de gente y cada día era tan ruidoso como un mercado.

"¡Pongamos a la Emperatriz y al Príncipe en la plaza y cortémosles la cabeza por quebrantar las leyes del cielo!"

"Hay que acelerar la coronación de Su Alteza para sofocar el caos"

"¡Todos los implicados deben ser derribados......!"

Las voces, alzadas en discordia, sonaban como los gritos en una carrera de caballos.

Navia estaba en una dependencia alejada de la parte más ruidosa del palacio principal, así que encontró un lugar relativamente apartado para preparar su espada más afilada.

El pueblo esperaba ansioso a ver cuándo salía de sus aposentos la Princesa Esseled.

Aparte del hecho de que era la persona más poderosa del país, la que más había contribuido a establecer al próximo emperador, cualquiera que hubiera sentido el poder de la luna blanca en el salón de banquetes aquel día no podía evitar preguntarse por ella.

Las especulaciones y los rumores no se hicieron esperar.

Los que estaban entre bastidores ya no dudaban en utilizar el término "santa" para describir a Navia.

No querían burlarse de ella porque no sabían exactamente cuáles eran sus poderes.

¿Y si, además de su poder para curar y purificar, Navia poseyera también un poder optimizado para la retribución? Los nobles mantuvieron la voz lo más baja posible, temiendo ser los primeros en ser castigados.

Sin embargo, no había noble, ni siquiera hombre adinerado de considerable poder, que no hubiera oído hablar de las increíbles habilidades de Nabia.

Por ello, la corte imperial bullía de actividad.

Tan silenciosa como Nabia, había otras familias que permanecían en silencio. Agnes y Lucia.

Las tres familias de las que más se hablaba en ese momento eran Esseled, Agnes y Lucía.

Las tres casas ducales del Imperio llevaban días igual de calladas, continuaban con ese silencio.

Era la calma antes de la tormenta.

* * *

"La Emperatriz debe estar más majestuosa que nunca"

dijo Nabia, girando hacia Minerva y los diseñadores de la Boutique Corazón, que estaban sentados a la mesa, esbozando rápidamente.

"Somos una nación recién victoriosa, en tiempos como estos, debemos presentar un frente fuerte al público, como si esto fuera sólo un parpadeo en el radar"

"Lo tendré en cuenta"

Habían acudido a la corte imperial en busca de los trajes para el funeral y la coronación de Mónica.

Navia les dio instrucciones detalladas sobre el aspecto que quería que tuviera Mónica en persona, luego se esmeró en forrar con tela negra todos los vestidos que tenía a mano.

"Aquí está el vestido negro para la Dama de la Casa. ¿Te ayudo a ponértelo?"

Navia asintió, con el rostro aterradoramente concentrado.

"Sí"

Movió la boca para responder, pero su mente se agitaba pensando en cómo manejar esta situación.

"Duquesa Lucía es la pariente más cercana de la Emperatriz, así que será la primera en ser lapidada"

Navia giró hacia la criada que tenía a su lado mientras terminaba de vestirse y se ponía los guantes negros de encaje.

"¿Cuándo se espera que Princesa Sarah Lucia entre en palacio?"

La respuesta llegó desde detrás de ella.

"Me han informado de que llegará antes del mediodía"

Charlotte, que debería estar en la residencia del Duque Esseled, había viajado a la corte imperial para apoyar a Navia.

"Charlotte......."

Navia sonrió alegremente ante la llegada de su aliada de confianza, su expresión rígida se alivió brevemente.

Por ahora, sin embargo, los negocios eran lo primero.

"Tan pronto como Sarah llegue, ¿podrías arreglar que se reúna con la Emperatriz?"

"Ya lo he hecho"

Charlotte sabía lo que Navia necesitaba.

"Gracias"

"De nada. Oí que el amo había regresado, pero no se le ve por ninguna parte..."

La gente de Esseled ya sabía que cuando Lark dormía, viajaba al Reino de los Dioses.

Así que no cuestionaron su aparición en la corte imperial en lugar de la residencia ducal.

Era Lark, así que era posible.

Eso fue lo que concluyeron.

"Papá tuvo que salir por un pequeño negocio".

La expresión de Navia al decirlo era claramente diferente.

Charlotte sonrió en silencio, interiormente aliviada.

"Nuestro Gaju es lo bastante fuerte como para manejarse bien en momentos de peligro, pero esto es mucho más agradable de ver"

Después de que Lark se durmiera, Navia se había sentido tan precaria como un pájaro planeando precariamente por un cielo oscuro, sin saber nunca cuándo podría caer un rayo.

Pero ahora no, porque se sentía más tranquila que nunca.

Ahora nada puede interponerse en el camino de nuestro pequeña Gaju.

Si lo hay, Lark será el primero en aplastarlo y derribarlo sin piedad.

'Esa sería Agnes'

Navia, vestida de gala, consultó el reloj de la mesa.

Ya casi es hora de que llegue el tío Erkin.

dijo Navia al cortesano mientras salía de la habitación.

"Iré a la sala del consejo donde están reunidos los señores. Diles que no se espera a la Emperatriz"

"Sí, mi señora"

Navia salió de las dependencias y entró en el palacio principal.

Inmediatamente los ojos comenzaron a volar hacia ella.

La atención era de esperar.

Navia se abrió paso entre la multitud tan despreocupadamente como si no viera nada más que el camino que estaba tomando.

Pero donde hay temeridad, hay valentía.

"¡Princesa!"

A lo lejos, un hombre se acercó a ella, llamándola con urgencia.

Navia miró al hombre con expresión tranquila y luego hizo un gesto a los caballeros.

Era una señal para que lo detuvieran.

No fue difícil detener al hombre. El único problema era que los ojos de los nobles habían cambiado desde que él había mostrado abiertamente interés por ella.

Les había atravesado el instinto de que si la perdían aquí, no tendrían otra oportunidad de hablar.

Navia estaba en un aprieto, ya que tenía que darse prisa para llegar a la reunión donde los señores estaban discutiendo.

Podía someterlos por la fuerza, pero era mejor evitar hacer algo que los enemistara.

No puedo molestarme en tratar con ellos.

Justo en ese momento, vi a un grupo de gente que se acercaba por la calle desde la dirección opuesta.

'¿Quién viene?'

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